2006/05/02

¿Qué pasa con los Deportes de Invierno?

Hay en el deporte español un antes y un después de la Olimpiada de Barcelona. Se invirtió mucho, se trabajó más y España pasó, en poco más de seis años, de cenicienta a potencia intermedia en el deporte mundial. El Plan ADO puesto en marcha por Javier Gómez Navarro y Rafael Cortés Elvira, trajo consigo no solo las veintitantas medallas alcanzadas en la cita barcelonesa sino también, y eso ha sido lo más importante, una estructura de trabajo que nos permite mantenernos en la élite en deportes que hasta Barcelona ‘92 solo alcanzaban protagonismo cuando de pascuas en ramos aparecía alguna de las figuras legendarias de nuestro deporte.
En manos de la genialidad o de la aparición de cuando en cuando de algún superdotado, España pasaba por las olimpiadas con las pena que gloria. Nos conformábamos con el ardor hispano de Mariano Haro, con los saltos de Rafa Blanquer que nos permitieron durante unos segundos soñar con la posibilidad de medalla en Méjico ‘68,o con la fuerza y la técnica descomunal de Herminio Menéndez que hizo salir el orgullo hispano en aquella inolvidable Olimpiada de Montreal. De vez en cuando nos caía alguna medalla de vela, los de baloncesto nos dieron la gran alegría en Los Ángeles y Abascal y José Luis González nos ilusionaban con una medalla que finalmente cayó, para el santanderino, en la cita californiana.
Afortunadamente todo eso ha cambiado y ahora, unas veces con más acierto y otras con menos, el papel del deporte español. En las Olimpiadas de verano, está por lo menos a la altura de la evolución que también ha tenido la sociedad española. Pero como no todo puede ser perfecto, también nuestro deporte tiene su lado oscuro. Es curioso que un país que pasa por ser, después de Suiza, el más montañoso del viejo continente, pase por las Olimpiadas de invierno con más pena que gloria.
No sé si hará falta que Jaca alcance es merecidísima organización de unos Juegos o que alguno de nuestros mandamases se conciencie, pero lo cierto es que en nuestras especialidades invernales seguimos estando en manos de las gloriosas excepciones ahora de M ª José Rienda, Carolina Ruiz o Jordi Font, y antes de los irrepetibles Paquito, Blanca Fernández Ochoa y hasta de Aurelio García que recordemos, entre otras muchas gestas, fue décimo segundo en aquel mítico salón de Saporo en donde Paco alcanzó la primera y única medalla de oro del esquí español.
Algo no está funcionando en los deportes de invierno. No sé si es un problema de instalaciones, de deportistas, de entrenadores, de dirigentes o de todo a la vez, lo que no es normal es esa falta de paralelismo entre el desarrollo que ha experimentado el deporte, llamémosle de verano y el estancamiento en el que están sumidas las especialidades invernales. Escuchemos a los que saben de esto y busquemos soluciones ya. Si queremos que Jaca organice la Olimpiada del catorce, necesitamos excelentes instalaciones pero también, deportistas que nos ilusionen.
Por Siro López, Subdirector de Deportes de Telemadrid.

No hay comentarios:

SNOW.boART.TV @ Facebook

SNOW.boART.TV on Facebook